Existen en el mercado muchos tipos de bisagras para elegir y dependiendo de tus necesidades podrás comprarte un tipo u otro. Si no sabes cuál debes adquirir, te vamos a dar un listado con las más habituales para que puedas elegir el modelo más adecuado para ti.
Lo primero que debes saber es qué es una bisagra. Se trata de un herraje que tiene dos piezas unidas a través de un eje que permite que las piezas puedan girarse sin llegar a separarse en momento alguno. Se pueden usar para muchas cosas aunque normalmente las puertas y los muebles son los que más la utilizan. A continuación vamos a ver los diferentes tipos de bisagras.
Bisagras de libro
Estas bisagras son las más populares y las más comunes. Son muy sencillas de usar y dentro de este rango se pueden encontrar diferentes modelos como las rústicas, las de latón o las cincadas. En cualquier caso sea cual sea el modelo elegido, la característica de todas ellas es que se abren como si fuera un libro y se atornillan a la madera de forma sencilla, pudiendo unirse dos cosas sin ningún esfuerzo como por ejemplo, una puerta de un mueble.
Bisagras de piano
Segun los cerrajeros en Orihuela 24h, son iguales que las de libro pero el tamaño es más grande, por lo que hay que sujetarlas con más tornillos. Esto lo que hace es que sea más fuerte y resistente para su uso. Como son muy grandes se tendrán que cortar dependiendo de las necesidades de cada y según el material de las que estén hechas, se pueden cortar con una tijera de chapa incluso, aunque a veces será necesaria una sierra de metal.
Bisagras desmontables
Esta opción es muy interesante cuando se va a necesitar desmontarlas, ya que se puede hacer sin quitar los tornillos, por lo que son bastante cómodas. Esto se puede hacer porque en su punto de unión tienen un pasador que al quitarlo hace que la bisagra se separe y que se vuelva a unir si se pone de nuevo.
Bisagras de Pernio
Esta opción es la más usada en ventanas. El problema viene porque no son demasiado fáciles a la hora de ponerlas, por lo que si no cuentas con experiencia, podrás pasar mucho tiempo intentando cuadrarlas. Por eso las suelen usar solamente los profesionales ya que a la hora de ponerlas el trabajo debe hacer con un formón o una fresadora.
Bisagras invisibles
También se las conoce como bisagras ocultas y son ideales para unir dos tableros y lograr que se abran como si fuera un libro.
Bisagras de doble acción
Se usan normalmente solo en las puertas que tienen que abrirse con un sistema de doble apertura, como las de las cocinas de los restaurantes, es decir, ese tipo de puertas que se abren tanto para dentro como para fuera y que al final vuelven a su posición inicial para facilitar la entrada y salida del camarero a la cocina. Son muy sencillas de instalar siempre y cuando se tenga el espacio necesario para poder abrir las puertas de esta forma.
Bisagras de cazoleta
Los muebles de la cocina son los que suelen utilizar este tipo de bisagras ya que son muy prácticas y por fuera del mueble no se pueden ver. Una de las ventajas que tienen este tipo de bisagras es que cuando llegan a un cierto ángulo, la puerta se cierra sola y su ángulo de apertura es bastante amplio, pudiendo regularse.
La desventaja es que no son sencilla de instalar y cualquier error mínimo a la hora de instalarlas, hará que su función no sea la correcta y no se abra ni cierre la puerta bien.
Dentro de este rango hay tres tipos: la de cazoleta recta que se debe usar cuando la puerta sea exterior al lateral; la bisagra súper acodada que se usa cuando es interior y la acodada que se usa cuando la puerta está en una zona intermedia.
También se pueden ver diversos modelos dentro de este rango, tanto de resistencia como de tamaño y grosor.
Bisagras de superficie
Su función es similar a las anteriores pero no será necesario hacer un fresado para instalarlas ya que son más sencillas de hacerlo. Con unos tornillos y un poco de cuidado conseguirás unir dos partes de un mueblo son este tipo de bisagras.
Bisagras para vidrio
Estas bisagras cuentan con una parte que tiene forma de U que se encarga de sujetar fuertemente el cristal y una vez sujeto, hay que poner uno o más tornillos especiales para que el cristal no se pueda salir.
Otras bisagras
Si necesitaras otro tipo de bisagras, no mejor es que acudas a tiendas especializadas para que te las puedan proporcionar, ya que a excepción de las mencionadas anteriormente, el resto no son demasiado fáciles de encontrar.